El Parque Sanitario SJD incorpora tecnologías de última generación en terapias para personas con diversidad funcional

Con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas atendidas a los diferentes dispositivos de la Red de Salud Mental, los profesionales del Parque Sanitario San Juan de Dios han abierto, desde hace unos meses, una línea de trabajo que introduce tecnologías de última generación que inciden positivamente tanto en su rehabilitación física como en su bienestar emocional.

Este es el caso de los dieciocho usuarios de la Residencia Santa Ricard, que ofrece apoyo generalizado a personas con Discapacidad Intelectual y problemas de salud mental, que desde hace meses, participan en un tratamiento multisensorial que ofrece una novedosa cabina de hidroterapia que los permite trabajar para relajar la musculatura corporal además de mejorar su bienestar emocional.

‘Lucía’, una experiencia multisensorial

‘Lucía’ es un dispositivo en forma de bañera, creado por la empresa ISENSI, basado en estudios de ergonomía, que deviene cómodo, higiénico y seguro para la persona que lo utiliza. Este dispositivo ofrece múltiples beneficios a todos los niveles, gracias a los ciclos de hidromasajes personalizados, controlados en todo momento por el profesional que lo acompaña.

La cabina ofrece un tratamiento muy completo, puesto que aparte de las pulverizaciones con efecto hidromasaje que producen un efecto inmediato de tranquilidad y armonía, la persona atendida también puede disfrutar de una sesión de aromaterapia ­-amb la inhalación de aromas naturales y aceites esenciales que lo invitan a relajarse -, una sesión de cromoterapia - donde puede escoger hasta cuatro colores que lo ayudan a equilibrar las emociones - y musicoterapia, con la que consigue mejorar el estado de ánimo, fomentar la interacción social y aligerar el dolor, entre otros beneficios.

Según Arantxa Bolivar, TCAI del Clínico Santo Ricard, “los usuarios cuentan también con una mesilla y unos auriculares, a través de los que pueden escoger qué quieren ver en cada sesión… En definitiva hace que completen una experiencia relajante y muy agradable.”

El tratamiento se hace cinco días a la semana y cuenta con dos programas de diferente duración (uno de 20 minutos y otro, de 50) y, hasta ahora, ha obtenido unos resultados muy positivos. Silvia Ángel, coordinadora  de los Servicios de Atención en Salud Mental para Personas con Discapacidad Intelectual del Parque Sanitario San Juan de Dios, asegura que “esta tecnología tiene beneficios que impactan en todo el cuerpo, tanto en el ámbito articular como en el ámbito motor, y favorece la flexibilidad, reduce la rigidez muscular y, al mismo tiempo, genera un bienestar tanto físico como psicológico a la persona atendida.”

El Proyecto AIDA, al frente de este nuevo modelo de rehabilitación avanzada

La cabina ‘Lucía’ es uno de los dispositivos surgidos a raíz de la puesta en marcha del Proyecto AIDA, de Atención Integral a personas con diversidad funcional. Modelo Avanzado, que nace a partir del apoyo altruista de la familia de una de las residentes a Santo Ricard,  y que  incorpora terapias con nuevas tecnologías que incluyen elementos multisensoriales orientados a mejorar la estimulación física y cognitiva de las personas atendidas y, en definitiva, conseguir que puedan tener una mejor calidad de vida.

En esta línea, y de manera escalonada, el proyecto prevé que se vayan incorporando nuevos tratamientos con elementos tecnológicos y que se incrementen las actividades terapéuticas y de tiempo libre, para fomentar al mismo tiempo la participación de las familias. El objetivo, a largo plazo, es desarrollar un modelo de rehabilitación avanzada que devenga un referente en la atención a la diversidad funcional.

Con esta, ya son dos las cabinas con este tipo de tratamiento de qué dispone el Parque Sanitario San Juan de Dios. La primera se instaló al Hospital de Atención Intermedia de Esplugues de Llobregat y da apoyo desde hace años a las personas usuarias con afectaciones motoras para ayudarlos a prevenir el deterioro físico, cognitivo, sensorial y social.